STEVE WINWOOD- CONCIERTO EN EL TEATRO CERVANTES (Málaga-16 de Noviembre de 2008)
El músico británico SW acaba de dar una serie de conciertos por España, con motivo de la presentación de su úlltimo album “Nine Lives”, que se editó en Mayo de 2008. Antes de Málaga (Festival de Jazz), tocó en Barcelona-Sala Apolo, el 13/11 y en Madrid, el sábado 15/11.
Cualquier entusiasta de la música de SW, desde sus inicios con THE SPENCER DAVIS GROUP, su participación en BLIND FAITH con Eric Clapton, miembro fundador de TRAFFIC (con una nueva reencarnación en 1994) junto a Jim Capaldi (tristemente fallecido), dueño de una prolífica y entusiasta carrera en solitario en los años 80, que actualmente ha desembocado en una “marmita” de sonidos diversos (jazz, soul, worldmusic, musica latina, rock, blues, etc...), al escucharle en su actuación malacitana hubiera optado por darle un 9, a semejanza de su reciente album de estudio.
Fan confeso de Winwood, optaré por darle no un 9, sino más bien un 7.
Trataré de explicarme:
Con una puntualidad británica el concierto dio comienzo a eso de las 21 horas, en un abarrotado Teatro Cervantes, que dias antes había recibido las visitas de Lizz Wright y del sexteto de Arturo Sandoval. El sonido no fue todo lo bueno que se esperaba, al menos en sus inicios (desde el público alguien comentó estos fallos). Se oía la voz de SW, pero oculta entre los sonidos de baterías y percusiones varias. Cuando uno escucha sus discos, su voz está por encima de los instrumentos. Luego, como era de esperar, a lo largo del concierto el sonido mejoró algo.
Los primeros compases de la actuación los dedicó a su nuevo album NINE LIVES, que ha recibido buenas críticas. Temas como “Secrets”, “Fly” o “Dirty City”. SW pegado a su órgano Hammond, no paraba de mover sus pies mientras sus manos avanzaban sobre el teclado. En Dirty City se colgó la Fender Stratocaster, para hacer un solo magnífico (uno que lo viera pensaría que se defiende a la guitarra casi mejor que a los teclados). Con una soberbia elegancia se paseaba por el escenario.
La banda engrasada, se nota que llevan juntos tocando. Destacaría el trabajo a la percusión de Karl Vanden Bossche (que figura en los créditos de ABOUT TIME del 2003), el de Paul Booth, al saxofón, flauta y voz (ocasionalmente en el órgano Hammond), José Neto, a la guitarra (magnífico en los temas de TRAFFIC) y Richard Bailey (que participó en ABOUT TIME) a la batería. Quizás en un primer momento el grupo anduvo algo descoordinado, pero fue poco tiempo.
Eché en falta temas de su disco del 2003 ABOUT TIME, que hubieran ido como anillo al dedo en esta actuación. Me estoy refiriendo a canciones como Cigano (For The Gypsies), Take It To The Final Hour, Why Can´t Live Together y Domingo Morning, entre otras.
De los años 90, de su disco JUNCTION OF SEVEN, nada de nada. “Gotta Get Back To My Baby” (muy latina) hubiera quedado magnífica, así como alguna balada: “Angel Of Mercy”o “Real Love”.
De los años 80, de “BACK IN THE HIGH LIFE” sonaron “Higher Love” y el tema que le da titulo. El primero con unos arreglos distintos (aunque se echaban en falta unos coros más negroides) y el segundo con Steve haciendo una introducción con una pequeña guitarra, mientras Paul Booth ocupaba su lugar en los teclados.
Eché de menos “Valerie” de TALKIN BACK TO THE NIGHT, además de While You See The Chance, Arc of a Diver y Night Train de su disco ochentero ARC OF A DIVER.
Si que sonaron en todo su esplendor los temas de BLIND FAITH (Can´t Find My Way Home), de SPENCER DAVIS GROUP (I´ am a man / Keep On Runnin) y de TRAFFIC (The Low Spark Of High Heeled Boys).
No quiero señalar con todo esto que fuese un mal concierto, sino que la selección de canciones no fue del todo la que yo me esperaba, sin embargo con un cancionero tan abultado como el suyo..., en ocasiones lo que hace es reinventar las canciones y no limitarse a reproducir lo que en su día grabó para sus discos de estudio.
También me dio la sensación de que en los bises repitió un tema que ya había tocado antes. El sonido sí que dejó mucho que desear, aunque al estar en las primeras filas pude oir su voz . Además su órgano Hammond no sonó claro y nítido. Para rematar la cuestión cuando interpretó en los bises su hit “Gimme Some Lovin” el Hammond falló y tuvo que recurrir a la guitarra, sin pensárselo. Al final los problemas se solucionaron y pudo volver a su instrumento “natural”.
Al terminar el concierto, Steve y sus músicos saludaron al público que puesto en pie les aplaudía a rabiar.
Se apagaron las luces del Teatro y la gente se marchaba a casa, un domingo del mes de Noviembre, cerca de las 23:30 horas. Cuando me dirijía al hotel pensé que un notable/7 estaría bien...a ver si la próxima vez llega a un 9 ó 10. Por trayectoria, canciones y sonido seguro que lo logra.