El mundo. esCONCIERTOS EN TODO EL MUNDO CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO
Génesis inaugura el macroconcierto de 'Live Earth' en Londres
EDUARDO SUÁREZ (Corresponsal) | EFE
LONDRES.- El mítico grupo británico Génesis ha dado comienzo al concierto Live Earth de Londres, después de que esta iniciativa musical contra el cambio climático tuviera los preámbulos de Sydney, Tokio, Johannesburgo, Shanghai y Hamburgo.
En un día parcialmente soleado en la capital británica, Génesis, grupo que ha vuelto a reunirse y con voz de Phil Collins, inició este concierto en el estadio de Wembley bajo el lema 'Live Earth 7/7/07'.
Un total de 150 artistas actúan en nueve ciudades durante un periodo de 24 horas.
Antes de Génesis, ha habido un solo de batería a cargo de Roger Taylor (Queen), Chad Smith (Red Hot Chilli Peppers) y Taylor Hawkins (Foo Fighters).
La parte londinense de la iniciativa musical se celebra en el remodelado Wembley, esta vez colmado de espectadores y donde el pasado domingo tuvo lugar el concierto en memoria de Diana de Gales, fallecida hace casi diez años en París.
El estadio no está tan lleno como entonces. En las gradas se ven muchas más calvas, pero en el campo de fútbol, ordenadamente distribuido con asientos la semana pasada, se apretujan este sábado muchas más personas. Tampoco hay tanta seguridad como el pasado domingo.
Después de Génesis, ha actuado Snow Patrol. Al acabar Wembley ha conectado con Sydney, donde en ese momento actuaba Crowded House. El público ha coreado 'Don't dream (it's over)' como si la banda estuviera tocando en el escenario. Acto seguido, han entrado Damien Rice y David Rice, que han levantado al estadio con una extraña pero eficaz versión del clásico 'Qué será, será'.
Como haciendo un guiño al patriotero discurso de Gordon Brown, el líder de Kasabian se ha plantado en el escenario enfundado en una camisa con los colores de la bandera británica. Su breve pero poderosa actuación ha desembocado en una conexión con Tokio y con las palabras del gran gurú, Al Gore, que ha proclamado desde Washington el llamado documento de las siete promesas, una declaración de principios contra el cambio climático que ya han firmado millones de personas en todo el mundo.
"Hay un proverbio que dice: 'Si quieres ir rápido ve solo, si quieres ir lejos ve acompañado'. Nosotros hoy queremos ir rápido y a la vez ir lejos, por eso estamos aquí", ha dicho el ex vicepresidente americano, desde un lugar muy cercano a la Casa Blanca, adonde no llegó por un puñado de votos en el año 2000.
La voz quebrada de Paolo Nutini ha reanudado el show, oscilando entre el torbellino eléctrico de las guitarras y la sencillez impostada de la versión de 'What a wonderful world'.
Entre el público, banderas de Italia, Grecia, Escocia o Ecuador. Mientras los grupos actúan, una pantalla va exhibiendo los nombres de quienes envian por SMS contribuciones a la lucha contra el calentamiento global.
Pero nunca ha saltado el estadio como cuando han aparecido los Black Eyed Pies, que reaparecían después del lanzamiento en solitario de Fergie. De la mano del recitado de Will.i.am y de la voz entre dulce y cortante de Fergie, el público ha botado al ritmo salvaje de 'Get it started' y se ha dejado mecer por 'Where is the love', cuyo recitado ha alcanzado por momentos la cadencia de un himno.
Cadencia que también alcanzó el clásico 'Ordinary world', que los Duran Duran lanzó al cielo de Wembley como una advertencia. Les había presentado la ex spice Geri Halliwell, que reconoció (por fin alguien sincero) no haber pensado "demasiado en el cambio climático".
No fue la única que hizo referencia a las acusaciones de hipocresía que han llovido sobre el concierto. El líder de Duran Duran, Simon Le Bon, gritó con rabia: "¡Que levante la mano quien no haya llegado a Wembley en un jet priavdo!", en referencia a la polémica en torno a los vuelos no regulares de las estrellas de la música.
Live Earth ha sido organizado por el ex vicepresidente de EEUU Al Gore, quien ha manifestado que los conciertos suponen el comienzo de una campaña de tres años para tratar de "curar al planeta".
Tras la actuación en Wembley, Génesis viaja a la ciudad de Manchester, al norte de Inglaterra, para dar comienzo su gira de conciertos estivales por el Reino Unido.
Después de Londres, la iniciativa musical pasará a Washington, Nueva Jersey y Río de Janeiro, sucesivamente.